Información y fake news: su impacto en la salud

Generalmente, cuando escuchamos el término “salud”, lo referimos a la parte física. Pero debemos entender que implica además otros aspectos del ser humano. Queda claro que la primera medida es la prevención y el cumplimiento de los protocolos vigentes. De todos modos, la buena información también es esencial para combatir la pandemia. Sí, los profesionales de la salud son los encargados de velar por nuestro bienestar. Sin embargo, la responsabilidad última recae en los comunicadores y todos los ciudadanos del mundo. Por eso, en el Día Mundial de la Salud, no podemos dejar de concientizar sobre los peligros de la desinformación. También así estamos luchando contra el COVID.

7 de abril: Día Mundial de la Salud

Cada 7 de abril se celebra el Día Mundial de la Salud. Dicha fecha se estableció, en 1948, para conmemorar la fundación de la Organización Mundial de la Salud (también conocida como OMS). Este es un organismo perteneciente a la Organización de las Naciones Unidas. Está especializado en gestionar políticas de prevención, promoción e intervención de salud, a nivel mundial. La OMS define a la salud como un estado completo de bienestar físico, mental y social. Abarca todas las esferas de acción del ser humano. Es innegable que la pandemia acrecentó ciertas diferencias sociales y económicas. Por lo tanto, este año, la OMS eligió el lema “Construir un mundo más justo y saludable”. Se propone así promover la equidad y justicia en materia de salud. Y se insta a los líderes mundiales a encauzar todas sus fuerzas para hacer esto posible.

La información, parte esencial de la salud humana

Ya llevamos más de un año inmersos en una pandemia que ha descolocado todas nuestras estructuras y ha cambiado la mayoría de nuestros hábitos. ¿Quién iba a decir que el barbijo se iba a transformar en un accesorio más dentro de la vestimenta cotidiana? Antes de salir a la calle, ahora chequeamos tener las llaves, el celular, el alcohol en gel en el bolsillo y el barbijo puesto. Además, en el último tiempo, ha crecido la cantidad de información que circula en los distintos medios: en los tradicionales y en los nuevos. 

De este modo, debemos aprehender un nuevo hábito: chequear todo dato o información que nos llega porque cabe la posibilidad de que sea falsa. Pero, ¿es esto posible? ¿Cuántas noticias arriban a nuestros celulares, mails y redes por minuto? Una parte proviene de los medios de comunicación tradicionales (radio, televisión y diarios). Pero no debemos olvidar la cantidad de información que nos llega a través de las redes sociales. Por eso, es importante conocer algunos tips básicos para descartar rápidamente información. A continuación, los compartimos.

Algunos tips para chequear la información

El primer paso es verificar la fuente, es decir, quién o qué institución está dando esa información. ¿Es una voz legítima y con autoridad sobre el tema? Podemos, por ejemplo, buscar su nombre en internet e investigar brevemente su profesión u otras declaraciones realizadas por la misma persona. De este modo, cotejamos que la información dicha sea coherente con su especialización, validamos su calidad de experto en el tema. Asimismo, es importante que entendamos la diferencia entre una opinión y un saber científico. Muchas figuras públicas, en la actualidad, manifiestan sus opiniones en redes y medios de comunicación. Sin embargo, su discurso es subjetivo y se debe comprender como tal. 

Por otro lado, si nos llega una noticia, hay elementos dentro de ella que nos van a permitir analizarla. Es el caso del título o las imágenes que incluye. Un título muy llamativo o sensacionalista debe activar nuestra alarma ya que está diseñado para generar reacciones negativas. Esto permite que dicha noticia se difunda rápidamente. Asimismo, muchas veces las fotos utilizadas son reales pero sacadas de contexto, obtenidas de otras noticias y recontextualizadas. Por último, es esencial reflexionar sobre el fin último de ese texto que llega a nosotros. En repetidas ocasiones, el objetivo que se persigue es persuadir, convencer, vender un producto y no, informar. 

Con la (buena) información también combatimos al COVID

Tal como observamos, los tips que compartimos nos sirven tanto para verificar noticias relacionadas con el COVID, pero también funcionan con cualquier tipo de noticia. Sea de la índole o temática que sea. Desde el auge de internet, vivimos en un estado de infodemia. Padecemos un bombardeo de información cuya magnitud nos impide hacer un análisis consciente de la misma. Hoy, la pandemia ha exacerbado dicha situación que se vuelve peligrosa para la salud humana. La desinformación y las fake news (noticias falsas) causan, entre otros efectos, saturación mental, depresión, confusión, agotamiento, inseguridad y angustia. Es por ello que se vuelve indispensable una actitud crítica y reflexiva sobre los mensajes difundidos. ¿Qué podemos hacer? Por lo pronto, seguir estos tips y no divulgar información falsa. Ya, con estos pocos y simples pasos, estaremos haciendo la parte que nos corresponde: mantener la salud social y mental, con responsabilidad.