El pasado 21 de septiembre, celebramos distintas fechas, entre las cuales se encuentran el Día del Artista Plástico, de la Primavera, del Estudiante, del Fotógrafo, entre otras. Tal vez podríamos pensar que tal coincidencia no es azarosa. En todas ellas, se intenta resaltar la creatividad, el ser humano y la misma naturaleza. Concretamente, el Día del Artista Plástico se instauró para reivindicar y reconocer el trabajo de los artistas en el mundo. Por lo tanto, en esta fecha tan especial, los invitamos a conocer la historia de Martha Magnani. Ella es una artista rosarina, descendiente de italianos. Su obra artística es la perfecta síntesis de la tríada que celebramos el 21 de septiembre: la vida humana, la natural y la fuerza creadora.
Martha Magnani y su primer contacto con el arte
Hoy, hablar de arte en Rosario es hablar de Martha Magnani. En la actualidad, es una gran exponente de la expresión artística contemporánea. Y podemos decir que el arte y ella son una misma esencia. “Mi primer contacto con el arte fue en 1962, cuando comencé a estudiar en el Instituto Superior de Bellas Artes de la Universidad Nacional del Litoral. Fueron cuatro años maravillosos, donde tuve como profesores a grandes maestros como Oscar Herrero Miranda, Hugo Ottmann, Ricardo Sívori y Rubén de la Colina. Luego, en 1967, fue mi primera muestra individual, a partir de un premio promoción que obtuve en un salón organizado por el canal Tref. Dicha muestra consistía en una exposición individual en una galería de arte de Rosario. A partir de allí, continué exponiendo de forma ininterrumpida hasta ahora”.
¿Qué significado tiene el arte plástico en su vida?
“El arte es una forma de expresión, un lenguaje, un modo de comunicación y de mensaje. Es un hecho con un contenido mágico y de misterio que moviliza y trasciende a través del tiempo. También sensibiliza, nos provoca una sensación muy especial. Si hablamos de la pintura, es una búsqueda constante donde se dialoga con la obra y donde se descarga todo el potencial expresivo. Van surgiendo imágenes, materia y color que se van cargando de energía. Como dice el autor italiano Umberto Eco: ‘la obra artística siempre es incompleta’, es una experiencia siempre inconclusa. Las imágenes se transforman, se completan ante la mirada del público. Se establece una comunicación con el espectador y un proceso de interpretación. La obra va creciendo en la medida que cada espectador la interpreta y la transforma. Es decir, crece con cada mirada”.
¿Cuáles son las temáticas que recorre en su obra?
“En mis primeras obras, incluí la figura humana. No estaba representada objetivamente sino por algunos detalles, entre grandes planos de color, muy saturados. La tarea del espectador era descubrir la figura humana en esas imágenes apenas determinadas. En la medida en que seguí trabajando en obras posteriores, fui destacando más las figuras y me volqué más en mis personajes. Fueron apareciendo figuras en grupos, alineadas en sentido horizontal y en sentido vertical. Estaban como en un friso: algunas de frente y otras de perfil. Luego, vinieron las series de los músicos y de los personajes, en donde aparecía el hombre en situación colectiva. Es decir, representé al grupo que lucha, que protesta y que espera”.
“Todos estaban agrupados en un espacio organizado por el color. Y la mujer siempre estaba presente: la mujer madre, esposa, hija, Patria. Luego, hubo otras series: la playa, los grupos de personas y personajes. También debo destacar la serie de las ventanas, una apertura hacia la naturaleza. Y no puedo olvidarme de la serie de las paredes: los muros de la ciudad, las texturas de las paredes, las grietas y los graffittis. Particularmente, me interesa la textura de la pared como historia, como personaje y como memoria”.
La naturaleza en la obra de Martha Magnani
Tal como observamos en todas estas series, la obra de Martha está en contacto permanente con la naturaleza y con la realidad en la que estamos sumergidos. A través de sus pinturas, esta artista rosarina se propone hacer explícito lo que no vemos, lo que no parece que es o lo que está latente. Asimismo, el color es el gran protagonista de su obra, por su valor energético y expresivo. “En los últimos años, desarrollé la serie del mundo submarino. En la última etapa de mi obra, encontré en las profundidades del mar, buceando con mi imaginación, un universo misterioso y mágico”.
“Hallé formas caprichosas y extrañas, múltiples especies de habitantes marinos, de vegetales y minerales. El color me atrapa y me provoca mucha energía. Incorporo las imágenes en la medida en que van apareciendo, haciendo visible lo invisible. La naturaleza es una riqueza inimaginable que debemos cuidar, conservar, siempre apostando a la vida. Pienso que estamos a tiempo de preservar la especie y resguardar nuestro planeta”.
Para terminar, ¿qué le diría a los jóvenes artistas plásticos que están iniciando en el mundo del arte?
“Les diría que rescaten lo mejor de su potencial, que busquen su esencia, que sean auténticos, que trabajen con entusiasmo, energía y creatividad. Es fundamental develar la auténtica naturaleza de las cosas, desde la realidad que nos rodea hasta los acontecimientos sociales y políticos. Además, les diría que mantengan vivo el espíritu de investigación y que trabajen con conocimientos técnicos. Por último, es importante la perseverancia, la imaginación y crear desde un auténtico compromiso con el arte”.
Photo Credit imagen de portada: Martha Magnani
