Cuando hablamos de pasiones compartidas entre Argentina e Italia, lo primero que se nos viene a la cabeza es el fútbol. En ambos países, los tifosi demuestran un amor a este deporte que no tiene comparación en el mundo. Esta cultura compartida y los fuertes lazos que unen a los dos países han llevado a que muchos jugadores y DTs emigren al futbol italiano. Hoy hablaremos sobre cuatro hermanos futbolistas nacidos en Rosario que fueron a jugar a la ciudad que vio nacer a sus padres. Estos son Angelo, Emilio, Cesare y Augusto Badini, quienes jugaron para el Bologna FC a partir de la década de 1910.
Angelo Badini: primer ídolo del club
Angelo nació el 23 de septiembre de 1894. En su niñez, el joven ítalo-argentino se formó en el Club Atlético Sparta, unos de los equipos clásicos del amateurismo en Rosario. Para 1912, su familia natal de Bolonia decidió volver a Italia, llevando a Angelo a jugar al Bologna FC. El mayor de los Badini era un jugador polifacético. En el principio de su carrera, se destacó cómo delantero, pero luego demostró que tenía grandes capacidades defensivas. Por esta razón, se terminó acomodando en el centro del campo, convirtiéndose en el corazón del equipo. Entre 1913 y 1921, Angelo brilló en el Bologna. Solamente dejó el equipo un año, en 1918, cuando jugó para la Unione Sportiva Milanese, club desaparecido hoy en día.
Angelo fue la primera gran figura del club. A su vuelta a la institución, se convirtió en el capitán y trascinatore, palabra italiana para nombrar al líder del equipo. Su carrera parecía prometerle al Bologna varios años de éxitos y gran fútbol. Sin embargo, el destino tuvo un triste giro. Angelo enfermó de sepsis en enero del año 1921, y de manera sorpresiva, murió el 12 de febrero del mismo año. En su honor, el campo donde el Bologna disputaba sus encuentros se rebautizó con su nombre. Una columna del diario Il Littorale lo recordaba como un jugador que le permitió al Bologna ser más grande, gracias a su habilidad, liderazgo, calidad como persona y sus enseñanzas a los jóvenes. La columna reza “Durante los momentos de incertidumbre durante un partido, su voz podía escucharse gritando “Fuerza Bologna!”, lo que era visto como un clamor de victoria“.
Emilio Badini: jugador de selección
Emilio, nacido en 1897, era tres años menor que Angelo. A pesar de jugar en el centro del campo al igual que su hermano, Emilio se destacó principalmente por sus cualidades ofensivas. Se decía que sus disparos cargaban con una potencia considerable, que anotaba de cualquier posición y distancia. El presidente del Bologna lo definía como “una pesadilla para los arqueros, y no metafóricamente”. En su corta carrera, marcó 29 goles, suma considerable para un centrocampista que jugó poco más de 50 partidos. Los hinchas del Bologna lo conocían cómo Badini II. Emilio llegó a jugar para la Selección Italiana en los juegos olímpicos de 1920. Allí disputó dos encuentros, una victoria ante Noruega 2-1 (donde anotó un gol) y una derrota frente a España por 2-0. Esta participación convirtió al segundo de los Badini en el primer jugador del Bologna en jugar para escuadra nacional.
Una curiosidad sobre Emilio es que participó en la Primer Guerra Mundial como oficial en el ejército italiano. Si bien su participación en el conflicto bélico no le dejaría problemas físicos, la mala fortuna también perseguiría a Emilio. Meses antes del último partido de su hermano, Badini II sufrió una lesión en la rodilla. A pesar de que posteriormente continuó jugando, las secuelas fueron devastadoras para su carrera. Seguidamente a la muerte de Angelo, sale del Bologna para jugar unos pocos partidos en el SPAL y el Virtus Bologna, retirándose del futbol con tan solo 24 años.
Cesare y Augusto
Nombrados como el prominente general romano y el emperador, los restantes hermanos también dejaron su marca en el club, pero no tuvieron la importancia de Angelo y Emilio. Sin embargo, los hinchas mantuvieron la nominación. Cesare, el tercer hermano, sería el Badini III y Augusto, el IV. Este último de los hermanos, apodado Nene, fue parte del plantel que le daría el primer Scudetto al Bologna en la temporada 1924-1925. A diferencia de Angelo y Emilio, Augusto jugaba como atacante del equipo.
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